¿Qué es el grafeno?
El grafeno es un nanomaterial y como otros similares, ha acaparado el interés de la investigación científica de las últimas décadas debido a sus excelentes propiedades.
El grafeno es una sustancia compuesta por carbono puro, con átomos organizados en un patrón regular hexagonal, parecido al grafito. Es un material casi transparente. Una lámina de un átomo de espesor es unas 200 veces más resistente que el acero actual más fuerte, siendo su densidad más o menos la misma que la de la fibra de carbono, y unas cinco veces más ligero que el aluminio.
Propiedades del Grafeno
Casos de uso de acuerdo con sus propiedades
- Construcción: La incorporación del grafeno puede ser de gran ayuda para construir edificios e infraestructuras más resistentes frente al paso del tiempo y los desastres naturales. Por ejemplo: cementos especiales.
- Ingeniería aeronáutica y automovilística: Dada la extraordinaria resistencia, el poco peso y la flexibilidad de su estructura, el grafeno muestra un enorme potencial para el diseño de partes para carros, barcos y aviones. Por ejemplo: la estructura base de un carro (chassis), hélices de barcos.
- Electrónica: Gracias a su eficiente conductividad eléctrica y a su capacidad de auto-enfriamiento, una de las aplicaciones del grafeno más esperadas es la fabricación de baterías más potentes y duraderas para los dispositivos electrónicos, como por ejemplo ordenadores y smartphones. También contribuirá al desarrollo de las pantallas táctiles flexibles.
- Energías renovables: Otra de las propiedades del grafeno más prometedoras es su facilidad para producir energía y transmitir la corriente de un lugar a otro. Esto resulta para la mejora y el avance de energías limpias como la energía solar, contribuyendo así al cuidado del medio ambiente.
- Medicina: Al ser un producto biocompatible, el grafeno puede ser aprovechado en el ámbito sanitario: Por ejemplo: Implementación de prótesis dentales.
Presentaciones del grafeno
En la actualidad, el grafeno se comercializa bajo dos formas: en lámina y en polvo.
- Grafeno en lámina: Es de alta calidad y se emplea en campos como la electrónica, la informática o incluso en sistemas de telecomunicaciones y satélites, donde se requiere obtener un material muy resistente. Su producción es muy costosa.
- Grafeno en polvo: Se utiliza en aquellos ámbitos en los que no se requiere de un material de alta calidad. Su proceso de obtención es más barato y permite una mayor producción del producto, pero teniendo que renunciar a gran parte de sus propiedades, ya que es muy complicado obtener monocapas de grafeno.